Sin leer crítica ni reseña alguna sobre él, me he decidido a leerlo dejándome llevar por la opinión de una muy buena amiga mía. Y no me arrepiento en absoluto.
Como su propio nombre indica y deja entrever, «Los invisibles» es una crítica social brutal a la marginalidad y desigualdad social que tiene lugar, hoy día, en nuestra sociedad, sobre todo en el ámbito infantil -situación que alimenta actividades ilegales y negocios del todo lucrativos al margen de la ley, a costa de su infancia- .
A través del discurso de tres niños con más bagaje que muchos adultos a sus espaldas, conocidos como Enana, Ismael y Ajo, se muestra una historia dura, basada en la más pura supervivencia y en la soledad más absoluta frente al peligro.
Una novela ágil, que se lee en un santiamén y, desde mi punto de vista, muy necesaria, pues aunque duela analizar estos hechos, hay que afrontarlos y ver el mundo tal como es, desde la perspectiva inhumana que lo corrompe y aceptando la existencia de la más cruda de las realidades.
Ponte a prueba con su lectura y permite que te pellizque el alma en más de una ocasión.
