LA VIDA FELIZ, de David Foenkinos.
Editorial: @alfaguaraes
«Nos repetimos a nosotros mismos que tenemos que aprovechar al máximo cada minuto de nuestras vidas (…) y regresa la indiferencia hasta el siguiente muerto».
«Para amar la vida de un modo pleno hay que entender su otra cara: la muerte».
«En algún momento de nuestra existencia todos queremos ser otra persona. Hay un gran deseo de morir y renacer».
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Éric Kherson, nuestro protagonista, se siente «quemado» por la vida, laboralmente hablando y en general. Su divorcio y lo poco que disfruta de su único hijo no ayudan a la situación.
Por otro lado, Amélie, una vieja conocida del instituto, contacta con él por las redes para proponerle un nuevo reto laboral. No se ha olvidado de él en todo este tiempo.
Ambos cambiarán el rumbo de sus vidas a través de enfrentarse a la muerte. Y es que, tras ese suceso, sienten el alivio de estar vivos y de tener la capacidad/responsabilidad de cambiar todo aquello que consideren con el motivo de ser felices, que la vida es un ratito.
Una historia breve pero intensa, como casi todas las del autor, que nos hace reflexionar sobre lo efímero de la vida y la necesidad de aprovechar cada momento haciendo lo que realmente queremos, y no dejándonos llevar en exceso por las imposiciones sociales.
Una lectura que he disfrutado mucho y que para nada me ha decepcionado pese a tener depositada en ella unas altas expectativas 
